“¿Marco, cuántos goles llevas esta temporada?”, le preguntó, entre carcajadas, su amigo Gerard Moreno a Asensio, el día de Reyes, cuando la plantilla del Espanyol visitaba los hospitales para llevarles regalos a los niños. “Es que tú no me la pasas nunca”, le respondió, con guasa, el mediapunta mallorquín. A partir de enero, Asensio se amigó con el gol y, además de sus nueve asistencias, sumó cuatro dianas, las dos últimas el domingo ante el Eibar —una, por cierto, tras un pase de Moreno— en lo que podría haber sido su último partido con el Espanyol. Ahora, le toca regresar a Madrid. Asensio se unirá al grupo de Zidane en la pretemporada por Estados Unidos y, a partir de ahí, se decidirá su futuro.
“Esta temporada ha sido muy buena para Marco. El equipo sufrió para evitar el descenso y él fue de los jugadores que más corrió. Aprendió a defender, a jugar sin balón, aspectos del juego que son muy valorados en el Madrid”, afirman desde el entorno de Asensio. “Llegó un poco con el cartel de estrella y la situación por la que pasó el equipo no le ayudó a mostrar su mejor versión. Es muy difícil jugar con la presión del descenso para un chico de 20 años, en su estreno en Primera. Pero es un chico que tiene la cabeza bien amueblada y un talento increíble”, convienen desde el vestuario del Espanyol.
“A nosotros nos gustaría que se quedara aquí. Sabemos que es difícil, que tiene la opción de jugar en el Madrid y además lo buscan otros equipos, pero nosotros le vamos a dejar la puerta abierta hasta el final”, aseguran desde la secretaría técnica del club blanquiazul. “Tiene ofertas de la Premier, de Alemania… ¿Quién no va a querer a Marco?”, afirman desde su entorno. Habrá que ver qué piensa Zidane.
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