No arroja la toalla y su idea es la de continuar en el club blanco una temporada más y, de esta manera, poder demostrar que tiene un sitio entre los elegidos por el francés. Los dirigentes del Real Madrid, sin embargo, no lo tienen tan claro y han decidido abrir un compás de espera antes de decidir el futuro del ex del Málaga.
El francés ha contado con los dos, pero nunca asumiendo el papel de fijos en el once. El internacional español se ha convertido en el primer recambio en muchos partidos. Pese a ello parece empeñado en revertir esta situación.
Son varios los equipos que se han acercado al entorno de Isco, pero por el momento el jugador no contempla la posibilidad de escuchar oferta alguna. La situación podría cambiar si el club blanco decidiera buscar destino al centrocampista, pero esa circunstancia todavía no se ha producido de manera oficial. Hay dudas, pero no una decisión definitiva respecto al futuro del malagueño.
Isco ha ido perdiendo peso dentro del equipo, especialmente tras la llegada de Zidane. Con Ancelotti como entrenador llegó a los 53 partidos jugados en cada una de las dos campañas. En esta ocasión suma 11 duelos menos. Con el italiano, Isco aparecía en cualquiera de las posiciones del centro del campo y la delantera. Era el chico para todo del que será entrenador del Bayern de Múnich a partir de la próxima semana y el jugador respondía con buen juego.
El bajón en su rendimiento es lo que ha llevado a los dirigentes a replantear la situación de Isco. Creen que puede y debe aportar más, de ahí las voces críticas.
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